viernes, noviembre 26, 2004

Safinas, en la marcha del 25 de Noviembre, junto al Movimiento de Mujeres Rosario

SOMOS MUCHAS MÁS QUE DOS...



Por Andrea López Gabriela Lorenzo para Otras Voces

Desde hace un año estamos trabajando en un grupo de acción-reflexión-acción lésbica feminista llamado Safinas. Todos los miércoles, nos reunimos en INDESO que, gentilmente, nos sede el espacio.

En el marco de la jornada del 25 de noviembre, Día internacional por la No-Violencia contra la mujer, creímos esencial mostrar la violencia que sufrimos las mujeres lesbianas.

A pesar de que, por ahora, somos un grupo pequeño y algunas compañeras aún no pueden hacer visible su condición lésbica, todas participamos activamente en la "Marcha del dolor".

Unas llevábamos chalecos negros con letras amarillas, en los que se podía leer en la espalda, "soy lesbiana" y en el frente distintas consignas que mostraban la violencia cotidiana que sufrimos por el sólo hecho de nombrarnos: "me echaron de casa", "no hay leyes que me protejan", "me quitaron mis hijos", "no puedo besarme en público", "me tratan como enferma".

Otras repartíamos volantes en los que se exponía que es violencia para nosotras las lesbianas: " La educación heterosexual compulsiva"," El no-reconocimiento social de nuestra existencia", "Que peligre la tenencia de nuestros hijos por hacer pública nuestra elección sexual ". Y exigiendo leyes que contemplen nuestra existencia y programas sociales que trabajen la problemática de violencia hacia y entre lesbianas.

Además, portamos nuestra pequeña bandera amarilla con letras violetas y un cartel que emulaba la señal vial de "pare" (rojo con letras blancas) que decía "PARE Basta de Violencia hacia las Lesbianas", con el que cortábamos la calle, junto a compañeras de otras agrupaciones, con sus carteles.

Durante la marcha dos de nuestras compañeras hicieron bastante ruido con los redoblantes y entre otros cantitos, acompañadas por todas las mujeres, cantamos (con melodía de todavía cantamos de Víctor Heredia):


”No queremos violencia, no queremos maltrato. No queremos silencio, no queremos mandato...
Las mujeres queremos terminar con la farsa y si somos lesbianas que nos vean la cara.....
... aunque no tengan ganas...”

Finalmente en la última parada, luego de la lectura del documento realizado por el movimiento de mujeres, hicimos una intervención en la que, mientras dos compañeras se besaban en público otras, que estaban entre la gente, les gritaban " enfermas, lesbianas, tortilleras, no se besen en público que hay chicos, degeneras". Ante los gritos las compañeras dejaron de besarse y agacharon sus cabezas, dando así pie a la lectura de un texto creado por nuestra compañera Natalia Bolcatto, texto que compartimos:

"La encerraron en una habitación. Atada a la cama, cada día entraba un hombre, siempre el mismo. Al cabo de unos meses la prisionera quedo embarazada entonces la obligaron a casarse con él. Los carceleros no eran policías ni soldados. Eran el padre y la madre de esta muchacha, casi niña, que había sido descubierta cuando se estaba besando y acariciando con una compañera de estudios" ( Eduardo Galeano "moral y buenas costumbres")

"Durante siglos las lesbianas hemos sido quemadas, encarceladas, tratadas como enfermas, anormales o pervertidas pero sin duda lo que ha ejercido mayor violencia sobre nosotras ha sido el silencio.
Las lesbianas no existimos, no figuramos en las leyes, en la historia, en la educación. Sólo figuramos en algún tratado médico, en los chistes o en los comentarios despectivos. Así, la lesbofobia se ejerce sobre nosotras reforzada por la familia, la iglesia, la escuela, creando una "legitimación de la violencia".
Compartimos con las mujeres heterosexuales la violencia ejercida por la sociedad patriarcal hacia todas las mujeres, pero sufrimos también una violencia específica por ser lesbianas. La norma de heterosexualidad compulsiva que nos rige desde que nacemos, el silencio y el desprecio, son actitudes de violencia hacia las lesbianas.
Por eso nosotras hoy venimos a denunciar esta violencia y a través de la palabra a romper con la "no-existencia" lesbiana y a decir, como escribió nuestra compañera Fabiana Tron: "el problema de la violencia es un problema estructural... La única manera de terminar realmente con la violencia de cualqier tipo que sea es desmantelando las ideologias sociales que aceptan la violencia como forma valida de resolver los conflictos..."


Esta exposición de Safinas dentro del movimiento de mujeres denunciando la violencia hacia a las mujeres y en especial hacia las lesbinas de manera pública, es un pequeño pero fundamental paso de visibilidad para nosotras, las lesbianas.

Compartir la lucha como mujeres lesbianas dentro del movimiento de mujeres, accionar en las calles, tomar la palabra por nosotras y por todas, no deja de llenarnos de emoción y orgullo pese a que sabemos el tan largo camino que aún nos queda por recorrer.

Nos queda la sensación de que hemos roto otro pedacito del enorme silencio que cubre nuestras existencias.

jueves, noviembre 25, 2004

Cambiemos las preguntas

Para descargar el archivo pincha en la imagen :)
Fuente: RIMA WEB Safo Piensa

"CAMBIEMOS LAS PREGUNTAS"

Campaña Nacional por una atención digna de las lesbianas y mujeres bisexuales en los sistemas de salud

Organiza y promueve: Espacio de Articulación Lésbica (Argentina)
Año 2006

El 28 de Mayo, Día Internacional de Acción por la Salud de la Mujer, es el elegido por el Espacio de Articulación Lésbica de la Argentina (Espartiles) para lanzar la Campaña Nacional "Cambiemos las preguntas" Por una atención digna de las lesbianas en los sistemas de salud.
Desde la elección de este Día por el movimiento internacional de mujeres en 1987, si bien mucho se ha hecho, mucho queda por hacer, y entre las deudas que la sociedad y el estado tienen para con la salud de las mujeres, una de las más silenciadas es la postergación sistemática del tratamiento de la problemática de la salud de las lesbianas.
Espartiles, es un espacio político de discusión y acción entre organizaciones de lésbicas y lesbianas activistas independientes de toda la Argentina, desde el cual elaboramos un documento que se distribuirá en los servicios de ginecología, hospitales públicos, facultades de medicina, secretarías y ministerios de salud y demás reparticiones públicas a fin de informar y concientizar a los profesionales de salud acerca de la realidad lésbica específicamente en el ámbito de la ginecología.
Si bien existe últimamente, una mayor exposición -mediática e inmediata- de las lesbianas como colectivo y como personas, a partir de la cual se han empezado a discutir algunos aspectos básicos alrededor de los derechos de las lesbianas que las organizaciones de activistas vienen reclamando desde hace años -Unión Civil, matrimonio, adopción, nuevos modelos de familia, discriminación laboral, etcétera-.
Sin embargo, no hay aún ni acciones concretas ni planificación de políticas de acción que atiendan a las necesidades específicas de la población lésbica. Este bache específico es atribuible a múltiples factores, pero entre ellos no es el de menor importancia la desinformación de los profesionales en cuanto a la salud de las lesbianas.
El documento de la Campaña "Cambiemos las preguntas" pretende reivindicar el
derecho a la salud integral, y exigir el respeto a la orientación sexual como
un derecho humano. Con este documento, Espartiles pretende, además, llegar a todas las lesbianas del país e instalar el tema en la sociedad en su conjunto.
De la presunción heterosexual a la posibilidad lésbica
La campaña surge de la necesidad de romper con la presunción heterosexual
que impone el cuestionario médico ginecológico a la hora de la consulta sin
reconocer la posibilidad de la práctica sexual lésbica. En la mayoría de los casos, los ginecólogos abordan la consulta con preguntas heterosexistas que clausuran la posibilidad misma de que quienes asisten a la consulta puedan informar sobre las prácticas lésbicas y menos todavía que puedan solicitar información específica con relación a cuidados y prevención de infecciones.
Dar lugar a la posibilidad lésbica faculta a los profesionales a informarse
sobre la realidad lesbiana, sobre los métodos de prevención de enfermedades.
Habilita, además, a que los profesionales puedan crear un ámbito agradable a
la hora de la consulta en donde cualquier mujer, sea lesbiana, bisexual o heterosexual, pueda expresar con libertad su práctica sexual. Dar lugar a la posibilidad lésbica es abrir un espacio en donde las lesbianas asistan a la consulta ginecológica sintiéndose cómodas y no discriminadas.
Respetar no cuesta, no ser respetadas sí tiene altos costos.
Espartiles, como una articulación de grupos y activistas de diferentes regiones del país, es expresión de las diversas realidades y necesidades que viven lesbianas y mujeres bisexuales en Argentina. Por eso cree necesario que esta Campaña llegue a las diferentes zonas del país, que pueda ser tomada en cuenta por quienes tienen la responsabilidad de diseñar políticas públicas que contemplen la diversidad de la población. Así mismo, el espacio busca también el apoyo de organizaciones de mujeres, y del colectivo lésbico-gay-travesti-bisexual.